El mundo y yo

Sí ya sé que dije que este blog estaría destinado exclusivamente al libro "El Arcángel de luz", pero tras meditarlo mejor he pensado que sería un error convertir mi espacio, en tan sólo un panfleto publicitario. De modo que también narraré algunas anécdotas diarias.

Bien, como muchos debéis saber, levantar un blog no es nada fácil. He perdido la cuenta de a cuántos blogeros les he llamado a la puerta a lo largo de la semana para presentarme e invitarles a pasar por aquí, por lo que confío que con el tiempo esto se vaya animando. Asimismo aprovecho la ocasión y digo a todo aquel que dispone de ciber-espacio, que estoy dispuesta a confiarles el libro para que en caso de que les guste, lo reseñen en su blog o sencillamente quieran unirse al mío o invitarme al suyo.

Luego esta el hecho de conseguir seguidores... uf, sin duda es parte de ¡la aventura! Me recuerda un poco a cuando fui comercial y a veces me recibían con una sonrisa y otras con un portazo en la cara. Por suerte desde el mundo de las redes sociales, esto último no es muy común pero existe otra forma más sutil de dar esquinazo y es con la frase siguiente... luego me paso por tu blog. Aunque sería injusto no reconocer que hay personas que han demostrado un gran interés y me han brindado mucho cariño, al igual que algunos blogeros.

Sin embargo lo que es realmente una aventura, es terminar una novela, registrarla y comenzar la búsqueda de las editoriales. Te pasas horas haciendo una lista en base a una segunda lista, elaborada por webs dedicadas al tema o sencillamente elaborada por un aventurero como tú, que ha tenido la generosidad de compartir desde su espacio. A continuación seleccionas las editoriales que se ajustan al género que has escrito y les mandas lo que piden (ojo, sólo lo que te piden). Y después llega el momento de la espera... Es cuando pasas a convertirte en un yonki del correo electrónico y a maldecir cada día que pasa sin una triste respuesta. Bueno sí, ahora mismo no aceptamos manuscritos debido a la saturación de trabajo, seréis capullos ¿y por qué no lo indicais en vuestra página web? os hubiera descartado a la primera ¡Me quedan más de seis meses así!, en ese mismo tiempo —soy muy consciente—, iré recibiendo patadas.

Hace poco leí a un compañero que afirmaba que a Hemingway le habían rechazado nada más y nada menos que veintisiete editoriales, pues bien, algo me dice que yo estaré en ese ranking de experimentados. Pero me queda un consuelo y es que lo podré hacer público.